Qué puedo y qué no puedo comprar en una farmacia online


 

Qué puedo y qué no puedo comprar en una farmacia online


Comprar en una farmacia online barata es algo cada vez más habitual. Pero mucha gente sigue sin tener claro qué tipo de artículos pueden comprarse en una farmacia de estas características y cuáles no. Por ejemplo, puedes comprar productos para cuidar tu línea de cara al verano, cremas solares para protegerte del sol y repelentes para mosquitos para contar con todo lo que necesitas para vacaciones. Incluso puedes adquirir los probióticos que necesitas para que los cambios de dieta no te afecten. A continuación, te contamos más cosas que puedes comprar y te resumimos brevemente qué es lo que no puedes adquirir en una farmacia online.
 

Cosméticos y artículos para bebés

 
Los productos cosméticos de venta en farmacia, son un referente en ventas para este tipo de establecimientos. Muchos clientes acuden a las farmacias solo para comprar este tipo de productos, los cuáles pueden salir más económicos al hacer una compra online además de poder ver toda la variedad existente con calma y comparar propiedades. También se encuentran todo tipo de artículos para bebés, desde las tetinas para el biberón hasta chupetes, productos específicos de aseo para niños o incluso termómetros para poder medir la temperatura en la frente o en el oído, lo que facilita mucho la tarea a los papás.
 

Aseo y botiquín

 
También puedes comprar a muy buen precio todo tipo de productos de aseo, como geles de baño, champús o cremas hidratantes para el cuerpo. Muchas marcas de productos de aseo de farmacia no están a la venta en supermercados. También puedes adquirir todo tipo de artículos de botiquín tales como gasas, tiritas o desinfectantes. Incluso hay a la venta, en muchas ocasiones, kits completos con precios de promoción. Las cremas para quemaduras o para dolores musculares, presentes en casi todos los hogares, también pueden adquirirse en estas farmacias online.
 

Actualmente, algunas farmacias ya venden medicamentos

 
Lo que no podías comprar hace unos años en ninguna farmacia online, eran medicamentos con receta. Estos solo podían ser despachados en farmacias físicas previa presentación de la tarjeta sanitaria y/o la receta. Primero empezaron algunas farmacias o tiendas de países no comunitarios, pero actualmente son numerosas farmacias las que ya pueden vender medicamentos.

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